Seguramente recuerdas con gran cariño aquél día que hiciste tu Primera Comunión. Vienen a tu mente, con cierta nostalgia, las imágenes de cómo lo viviste: Tu vestuario, los accesorios, la misa, el festejo en familia, los invitados, los regalos que recibiste y, por supuesto, tus padrinos.
Es uno de los primeros grandes eventos en tu infancia, en el que eres protagonista de la fiesta, la atención es para ti. Todo, absolutamente todo, se prepara pensando en tu felicidad.
Tus padres, tus padrinos, tu parroquia y tus familiares, ponen tanto empeño para que este día se quede grabado en tu mente, en tu corazón y en tu alma, por toda la eternidad.
Si ahora participas como mamá, papá, madrina o padrino de una pequeña o pequeño que se está preparando para celebrar su Primera Comunión, tienes la oportunidad de hacer todo lo necesario para que se sienta especial. ¡Ayúdale a tener un recuerdo maravilloso de esta celebración que no vuelve a repetirse!
¿Qué es la Primera Comunión y por qué es importante?
La primera comunión, también conocida como Eucaristía, es uno de los siete sacramentos de la iglesia. Es la primera vez que un cristiano recibe el cuerpo y la sangre de Cristo.
Tiene su origen en la Última Cena de Jesucristo con los doce Apóstoles, en la que también repartió su cuerpo y su sangre para todos. Por ello, es un paso muy importante y un momento esencial en la vida de todos los católicos.
El acto de la Comunión significa que el infante se ha convertido en una persona más madura y relevante dentro de la comunidad cristiana. Es su primera experiencia espiritual siendo consciente de ello. Es el primer acto que lo acerca a Dios y que, a partir de ahora, seguirán estrechando su relación cada vez que la persona reciba la eucaristía en la celebración de la santa misa o cualquier otro evento católico que la ofrezca.
Lo indispensable que debes comprar para tu hijo(a) o ahijado(a) en este gran evento.
Todos los sacramentos tienen simbolismos que deben estar presentes durante la celebración.
Aquí tienes la lista completa de vestidos y ornamentos que debes comprar para la Primera Comunión y el significado de cada símbolo.
EL VESTIDO
El atuendo de la niña debe cumplir con lo siguiente:
Debe ser de color blanco, largo hasta el tobillo, generalmente está adornado con flores, encajes, listones y tiras bordadas. Simbolizan la pureza y todas las buenas obras que la niña realizará a lo largo de su vida para embellecer aún más su alma.
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También se acostumbra que las niñas lleven una corona de flores en la cabeza sosteniendo un velo corto. La corona de flores simboliza la alegría de ir al encuentro del Señor, y el velo sobre la cabeza, la fe que ilumina la razón y que nos lleva a conocer a Dios.
Algunos papás/padrinos complementan el vestuario de la niña con guantes blancos para resaltar su inocencia y pureza.
EL TRAJE
La ropa que lleva el niño suele tener algunas variantes. Puede estar formado por camisa y pantalón blancos o por un traje completo en color liso.
El color blanco del pantalón y la camisa simboliza la pureza del niño que recibe a Jesucristo por vez primera. Nos hace recordar la limpieza del alma que acaba de ser purificada por el sacramento de la confesión.
Hay quienes acostumbran colocar un moño blanco o azul claro en el brazo derecho del niño.
LA MEDALLA
Su medalla de bautizo. Esta medalla nos recuerda la pertenencia del niño al Cuerpo místico de Cristo. Nos recuerda las promesas bautismales que el niño renovará ese día y la misión que comparte con Jesucristo de ser sacerdote, profeta y rey.
En caso de que no tenga medalla de bautizo, puede llevar una conmemorativa de su Primera Comunión.
EL CRUCIFIJO
Simboliza las obligaciones de hijo, hermano, amigo, estudiante y ciudadano, que deberá cumplir el niño o niña a lo largo de su vida, y que representan la cruz que deberá tomar y llevar con amor y responsabilidad para ser un digno seguidor de Jesucristo.
EL ROSARIO
La palabra rosario significa corona de rosas. Simboliza su confianza en la ayuda y protección de la Virgen María como su Madre del cielo y su compromiso de rezar el rosario con frecuencia para lograr la paz del mundo, la unión de las familias y la conversión de los pecadores.
Regalar un rosario de alta durabilidad es muy conveniente.
LA VELA
Una vela blanca hecha de parafina y adornada con motivos alusivos, la cual se enciende con el fuego del cirio Pascual, al iniciarse la liturgia eucarística.
Simboliza dos cosas:
- Que recibe la luz de Cristo como guía que iluminará siempre sus pasos hacia la vida eterna.
- Que recibe de Cristo la misión de ser luz del mundo, la misión de guiar a todos los hombres, con sus palabras y su testimonio hacia la vida eterna.
Por lo regular se usa la misma del bautismo. Si olvidaste guardarla o ya está muy maltratada, no te preocupes, también tenemos gran variedad.
LA BIBLIA
Es un símbolo de que él mismo invita a Jesucristo, la Palabra, a acompañarlo por el resto de su vida. De que leerá frecuentemente la Sagrada Escritura para conocer cada día mejor a Jesús y así parecerse más a Él.
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Requisitos para hacer la Primera Comunión que debe cumplir el infante (vigentes en 2020).
Para poder realizar este ritual eucarístico se debe cumplir con lo siguiente:
- La edad mínima para recibir la Primera Comunión, según la modificación hecha por la Arquidiócesis Primada de México hace dos años, es a los nueve años cumplidos.
- Estar bautizado es un requisito imprescindible.
- Haber recibido la preparación para acercarse a la unión con Cristo, conocida como catequesis. De acuerdo con la modificación mencionada arriba, el tiempo de preparación es de dos años.
- Realizar el acto de penitencia, es decir, haber sido confesado y haber cumplido con las plegarias para pedir perdón que el sacerdote le haya impuesto.
- Hacer los trámites administrativos de inscripción en la parroquia que corresponda.
¿Cuándo se celebra este Sacramento?
Por lo general, esta celebración se lleva a cabo durante los meses de abril, mayo y junio de cada año.
Te aconsejamos que te acerques a tu parroquia para ver la disponibilidad que tiene. Este Sacramento lo lleva a cabo el sacerdote, lo que facilita las cosas en cuestión de fechas en comparación con el Sacramento de la Confirmación, el cual es celebrado solamente por el Señor Obispo.
Lo que debes saber sobre los Padres y Padrinos.
Según el Código de Derecho Canónico (CDC) que rige a la Iglesia Católica, los padres de familia son los primeros y principales responsables de «formar a sus hijos en la fe y en la práctica de la vida cristiana, mediante la palabra y el ejemplo» (CDC 774.2), y en el Catecismo de la Iglesia Católica (CIC) se menciona que es tarea de ambos «alimentar la vida que Dios les ha confiado» (CIC 1251).
Los papás deben facilitar el «despertar religioso» de sus hijos, iniciarlos en la oración personal y comunitaria, educarlos en la conciencia moral, acompañarlos en el desarrollo del sentido del amor humano, del trabajo, de la convivencia y del compromiso en el mundo, dentro de una perspectiva cristiana. Los papás, más que transmitir contenidos, introducen a sus hijos, y en especial a los más pequeños, en un ambiente de vida propio de una familia cristiana.
El padrino o madrina comparten responsablemente con los papás todos los compromisos y exigencias que surgen (ver CDC 774.2), especialmente, son invitados a preocuparse y actuar, junto con los papás, por la educación cristiana de su ahijado(a). Pueden verse obligados, en ciertos casos, a reemplazar a los papás en esta tarea. Ocupan un lugar importante en el espíritu y ambiente familiar.
Condiciones necesarias para que una persona sea admitida como Padrino o Madrina.
Estos requisitos están contenidos en el Canon 874. Debemos aclarar que, en relación con el Sacramento de la Eucaristía o Primera Comunión, los requisitos no se indican de manera expresa, pero se entiende que deben ser los mismos que para el Bautismo y la Confirmación, que son los siguientes:
- Que haya sido elegido por quien va a bautizarse (en el caso de una persona que ha entrado al uso de razón), o por sus padres (los cuales tienen la obligación de hacer que sus hijos sean bautizados), o por quienes ocupan su lugar (es decir tutores), o por el párroco o ministro.
- Que el padrino tenga más de dieciséis años, pero se permite que el Obispo Diocesano establezca otra edad, y asimismo faculta al párroco o ministro para que por justa causa pueda admitir una excepción.
- El padrino (o madrina) tiene que ser católico, estar confirmado y haber recibido la Primera Comunión.
- Asimismo no ha de estar afectado por una pena canónica. Es decir, que no haya cometido faltas graves a lo que dicta la Iglesia Católica.
- La misión de padrino (o madrina) no puede ejercerla el papá o la mamá, por lo que se indica que tiene que ser persona diferente.
Ante cualquier duda sobre estos requisitos, es aconsejable consultar directamente con tu parroquia para aclarar la situación.